Como cada año, una vez finalizadas las fiestas patronales y regresando a la rutina, quiero dejar constancia de las labores de mantenimiento realizadas en las campanas durante este 2024.
En esta ocasión, nos reunimos el sábado 24 de agosto a las 7 de la mañana en la plaza de la Iglesia. Estuvimos presentes Fran, Ricardo, Juan Carlos, Víctor, Óscar, Joan, Guillermo y yo. Aunque este año tuvimos algunas ausencias notables, también contamos con nuevas incorporaciones, como Guillermo, quien, a sus 14 años, nos contagia con su energía y entusiasmo por colaborar.
Lo primero que hicimos al llegar fue montar el andamiaje para acceder con seguridad a la campana pequeña. Después, procedimos a invertir las campanas mediana y segunda para comenzar con su mantenimiento. Al revisar los mecanismos, detectamos que el martillo de la campana mayor no realizaba el retroceso adecuadamente, así que desmontamos su caja, tensamos el muelle y engrasamos las zonas de fricción.
A las 8 en punto, llevamos a cabo el toque manual del alba: Víctor se encargó de la campana pequeña y Juan Carlos Gómez de la grande. A continuación, realizamos el volteo manual de la campana pequeña para anunciar que estábamos inmersos en la novena en honor a la Virgen de la Soledad, nuestra patrona.
Tras finalizar el toque, invertimos las campanas mayor y dejuni, ya que contábamos con un buen número de campaneros y así pudimos distribuirnos mejor entre las diferentes campanas para optimizar el tiempo.
Este año, el mantenimiento se centró en el ajuste de las tuercas que lo requerían y, como es habitual, en el barnizado de las maderas de los yugos, prestando especial atención a la cara exterior. También dimos una capa de pintura a todos los herrajes, así como a los badajos, martillos y soportes del motor.
Siguiendo la tradición, a las 9:30 h. bajamos a reponer fuerzas con el típico almuerzo. Nos esperaban el nuevo párroco, D. Eugenio, junto a Isa, Laura Rico, Laura Bernabé, Luisita, Mari Carmen y las nuevas generaciones representadas por Bruno, Júlia y Martina.
Sobre las 10:15 h. retomamos el trabajo, concluyendo en torno a las 13:30 h. Quiero destacar que, este año, también actuamos sobre la matraca, barnizando sus partes de madera y aplicando pintura antioxidante en las metálicas.
Con esta intervención, dejamos las campanas en perfecto estado para las próximas fiestas de Moros y Cristianos, en honor a nuestra patrona, la Virgen de la Soledad. Estos son días en los que las campanas cobran especial protagonismo, siendo la música más alta que resuena en Castalla. En breve, realizaremos también el mantenimiento de las campanas del convento y de la ermita.