¿LA LEY DEL EMBUDO?

                                             

                Antes de desglosar el título de esta entrada, quiero comentar que las obras del piso de la iglesia están bastante avanzadas. A estas fechas más de la mitad de la nave central ya tiene el nuevo pavimento colocado; también lo tiene la sacristía y la nueva habitación recuperada bajo ésta, la capilla de Santo Tomás está a falta de los remates, escalera de bajada al antiguo cuarto de las andas y la retirada del órgano, faltando parte de la nave central, tres capillas laterales y el presbiterio, que aunque en el presupuesto inicial no estaba considerado, se ha decidió su sustitución, pues hubiera quedado precisamente el altar con un pavimento de muy inferior calidad al resto de la nave.

              Viendo el avance que en la actualidad llevan las obras, ya  podemos aventurar una respuesta a la pregunta de la entrada anterior ¿estará para fiestas?  Siendo la respuesta  más claramente un sí, sin desestimar el gran trabajo que quedará una vez finalizada la obra para la limpieza de todo el templo, colocación de imágenes, viacrucis, bancos, lámparas, focos y nueva red de megafonía. 

                 Haciendo ahora ya referencia al título de la entrada, quiero dejar bien claro que esta es una opinión personal, sin pretender buscar polémicas que no conducen a nada, pues soy de esas personas que piensan que sumando esfuerzos, la sociedad avanza y con confrontaciones retrocede, pero hay hechos que al menos creo deben ser dignos de mención.

             El hecho en sí al que me refiero son las obras que se están llevando a cabo en la calle carril de la sang, derribo de algunas casas y retirada del escombro de otras, motivo por el cual la imagen de la patrona no ha subido a su ermita, pues bien: Subía yo para programar la campana de la ermita en el triduo a la virgen, cuando me encontré la calle cortada y levantada, por lo que tuve que bordear todas las obras y subir por la calle de la amargura.

               Mientras bordeaba las obras y tomaba algunas fotografías, pude comprobar la envergadura de estas, y aunque reconozco que eran de vital importancia y que hacía años que se debían acometer, me vino en mente una pregunta ¿habrá habido seguimiento arqueológico? Pues se han tocado cimientos, se ha excavado en la calle para reforzarla con hormigón y hierro, se han retirado cimientos de algunas casas, se han derribado otras y se han evacuado toneladas de escombro. Después de diversas indagaciones he podido saber que se está realizando todo sin dicho seguimiento arqueológico, y me vuelvo a preguntar ¿no me afirmaban algunos anónimos en otra entrada que estas actuaciones eran por ley? Pues parece que esta ley no es igual para todos, o tal vez sea como afirman en mi pueblo, la ley del embudo…

          Para concluir quiero dejar constancia que el protocolo arqueológico de la parroquia ha costado más dinero que todo el piso de mármol del presbiterio.