Que tenga constancia hasta nuestros días, ocho han sido las campanas colocadas a través de los siglos en el campanario de nuestro templo parroquial, sin contar las refundidas como nuevas, de hacerlo la suma sería de once. Voy a narrarlas de la más antigua a la más reciente.
1 ª Campana: "BÁRBARA BUENAVENTURA"
Esta es la primera que se colocó y fue exactamente a los 55 años de haberse consagrado y comenzado el culto en la nueva parroquia, esto se hizo en el mes de diciembre de 1626, siendo cura párroco D. Vicente Richard natural de Biar.
Se desconoce qué sucedió con esta campana porque no ha llegado hasta nuestros días, es de suponer que sería derribada en alguna guerra.
No tiene sentido pensar que durante estos 55 años estuviera la nueva Iglesia sin campana y en cambio la antigua, hoy ermita, si la tuviera, por lógica alguna campana ya debería tener desde su consagración.
Esta se puso en noviembre de 1690, es decir 64 años después de la primera, el cura que lo tramitó y llevó a cabo esta obra era D. Antonio García, natural de Olleria.
Tampoco sabemos que suerte pudo tener esta campana pero se deduce que desaparecería junto con la primera, también es totalmente desconocido sus dimensiones y pesos.
3 ª Campana: "MARIA DE LA ASUNCIÓN"
Se fundió y puso en el campanario en el mes de septiembre de 1739, siendo cura el Dr.. D. Cristóbal Ronda, natural de Callosa. Esta se dedicó a la Asunción de la Virgen, titular de la parroquia, y ha llegado hasta nuestros días después de una larga historia.
En 1830 se refundió y su inscripción dice:
"MARIA DE LA ASUNCION ME LLAMO. ME REFUNDIERON EN 10 DE AGOSTO DE 1830 A EXPENSAS DEL DIFUNTO Dr.. D. JERONIMO JOVER, CURA QUE FUE DE LA PARROQUIAL DE ESTA VILLA DE CASTALLA. RUEGUEN A DIOS POR SU ALMA ".
Se le conoce popularmente con el sobrenombre de "la mediana".
Esta refundición se realizó en la misma ciudad de Castalla, en un pequeño callejón sin salida, que aún recibe el nombre de "Rincón de la campana" y donde hasta no hace muchos años quedaban utensilios de esta operasió. No hay datos concretos sobre el motivo de esta refundición pero entre uno de estos dos debió de ser.
1 º Que la campana estuviera rota, y por tal motivo su única solución era refundición.
2 º Que fuera para agrandarla, añadiéndole bronce, y buscar así la nota que produjera el acorde musical perfecto entre la "dejuni" y la mayor.
En el mes de agosto de 1986 en la procesión del patrón de la ciudad, San Roque, esta campana se agrietó. Después de pasar las fiestas patronales de septiembre, el cura regente D. Francisco Berbegal dio los primeros pasos para estudiar si había alguna solución para recuperarla, para lo cual se puso en contacto con el centro de investigación del hierro y el acero de Madrid, recibiendo éste la información que podía haber una solución de soldadura pero que no en todas las campanas resultaba, era un riesgo que debía correr. Intentando éste por todos los medios salvar la campana accede a ello. Recibió la información de la conveniencia de esperar al siguiente verano por que la campana se debía calentar a 300 grados de temperatura y le eran perjudiciales los cambios bruscos, al tiempo que había que analizar su aleación para ver los electrodos para la soldadura.
A finales de Julio del siguiente año, 1987, se baja la campana y se lleva a las industrias de Berjusa en Castalla, frente al cuartel de la Guardia Civil, donde comenzó "la operación soldadura". En los primeros días del mes de agosto de ese mismo año, se volvió a colocar la campana ya soldada en su lugar, y a continuación la volteé, comprobando todos los que allí estaban con gran pesadez, que no había unido la soldadura y el sonido era pésimo.
En el mes de febrero del siguiente año 1988, se forma una junta con miembros amantes de nuestras campanas y algunos de los que ya participaron en "la operación soldadura", intentando buscar una solución para el problema. Para ello se hicieron programas de televisión local, de radio e incluso se consultó al pueblo para darle la mejor solución posible. Las opciones que se estudiaron fueron tres:
1 ª Refundirla y dejarla tal cual era.
2 ª Refundirla y añadirle 1000 kilos de bronce.
3 ª Fundir una campana nueva de 1600 kilos y guardar la antigua como pieza de museo.
Esta última fue la opción por la que la mayoría de la gente se inclinó, para que no desapareciera esta campana porque se consideró que formaba parte de la historia de Castalla.
En 1989 se subió la nueva campana Bautizada con su mismo nombre, porque era para sustituirla, y se bajó esta, guardandola en un rincón de la casa abadía donde permaneció hasta el mes de mayo de 2002, fecha en que el párroco D. Juan Carlos Ferri, natural del Pinoso, la mandó a Alemania, atraves de la empresa TECNICA Y ARTESANÍA 2001 , para aplicarle un tipo de soldadura desconocida en España hasta hace muy pocos años, colocándose nuevamente en el campanario en el mes de julio de ese mismo año y habiendo recuperado el sonido original que tenía antes de la rotura de 1986.
Toda la vida agradeceré ha este sacerdote el detalle que tuvo conmigo, ya que después de la colocación, en la que yo no estuve presente porque me encontraba trabajando, dio orden a los montadores de Técnica y Artesanía 2001 que no la voltearan, por que ese primer volteo, segun él, debería realizarselo yo. Fue un volteo largo y muy emotivo, lo realizamos entre los dos, y todos los presentes pudimos comprobar con gran satisfacción que había recuperado el sonido.
El bronce tiene un peso de 632 kilos que con la trucha de madera de 360 kilos y 110 de herrajes suman un total de 1.102 kilos
4 ª Campana: "SANTO TOMAS Y SANTA BÁRBARA"
Se fundió y colocó en el campanario en 1803 siendo rector el Dr.. D. Luis Jerónimo Jover natural de Ibi. Esta campana es la más antigua que se conserva en este campanario sin haber sufrido ninguna refundición ni manipulación sobre el bronce, y su inscripción dice:
Se le reconoce popularmente con el sobrenombre de la "DEJUNI" porque entre otras misiones tenía la de avisar a los días de ayuno. En la actualidad este toque esta desaparecido. Es muy frecuente encontrar campanas dedicadas Santa Bárbara especialmente en poblaciones agrícolas, por ser la abogada contra las inclemencias del tiempo especialmente las tormentas. Seguramente se le pondría este nombre por que los agricultores echarían en falta la anterior BÁRBARA BUENAVENTURA de1626. La otra dedicación probablemente sería por que la gente recordaba la visita de SANTO TOMAS DE VILLA NUEVA hombre muy piadoso y volcado con los más necesitados, cuando siendo arzobispo de Valencia, diócesis a la que pertenecíamos, se hospedó en la antigua casa abadía situada en la plaza a la que también se le puso su nombre y que ha llegado casi hasta nuestros días. También existía un mural de azulejos justo al lado de la ventana por la que se asomó y dirigió la palabra al pueblo allí congregado.
Tiene un peso de 340 kilos de bronce que junto con los 200 de madera del contrapeso y los 65 de herrajes suma 605 kilos
5 ª Campana: "SAN ROQUE"
Se fundió el 9 de octubre de 1807 y se colocó ese mismo mes, su inscripción decía:
"SAN ROQUE PATRON DE ESTA VILLA DE CASTALLA A EXPENSAS DEL COMUN AÑO 1807".
Su peso era de 1149 kilos y era conocida con el sobrenombre de "campana mayor", teniendo una tonalidad muy grave. El cura que lo tramitó fue D Luis Jerónimo Jover, natural de Ibi. Esta campana, seguramente habrá sido la más apreciada por los habitantes de Castalla, precisamente por esa tonalidad tan grave y dulce al oído.
El día 26 de marzo de 1978, domingo de Pascua de Resurrección, en la Bajada de la Patrona a la parroquia, en la Procesión del encuentro, esta campana se agrietó. El 10 de abril del mismo año, el párroco D. Toribio Sellés mandó una carta a las industrias de Salvador Manclús, especialistas en campanas, preguntando si había alguna solución, el 15 del mismo le contesta diciéndole que sólo existía la posibilidad de refundirla.
Después de comunicar el problema al pueblo, se ofrecieron voluntarios para la tarea de bajarla, llevarla a Valencia, volverla y colocarla, la asociación de camioneros de Castalla, sufragando el gasto de la grúa Ferry "Ramper". Comenzaron la tarea el día 13 de mayo a las 4 de la tarde, después de doblarse el plumín de la grúa y empezar a oscurecer, desistieron por no poder sacarla, ya que los ejes de la truja se habían quedado encasquetados contra la pared. Se reanudó la operación el domingo 21 del mismo a las 9 de la mañana, desmontando esta vez parte del contrapeso para sacarla por piezas, y así consiguieron a las 10.45 tenerla ya dentro del camión de "Pitarch ", quien al día siguiente, lunes, la llevó a Valencia.
Se refundió el 7 de julio de 1978 y por una confusión entre el Párroco y el fundidor no se puso la inscripción que la campana tenía, diciendo sólo en la actualidad: "REFUNDIDA EN 1978, SIENDO CURA PARROCO D. TORIBIO SELLES", según el mismo cura me manifestó, él creía que esta inscripción se añadiría al original que la campana tenía desde su fundición, indicando por supuesto a quien estaba dedicada "San Roque" y la población "Castalla".
Se colocó el sábado 26 de agosto, y su primer volteo lo realizó a las 9.15 horas, anunciando a Juan Pablo I que esa misma tarde fue elegido Papa. Al oírla, todos los que allí estábamos y mucha gente que acudió, quedamos bastante decepcionados, porque su sonido era menos dulce al oído y menos grave que antes de la refundición. Al día siguiente, domingo, me pidió D. Toribio que realizara un volteo con esta campana sólo, después de cada misa, en honor a los contribuyentes que lo estaban sufragando.
Costó la refundición 145.125 pesetas más 2.400 que se pagaron a "Ramper", recaudando el cura 267.900 pesetas y destinando las 120.375 restantes para restaurar las capillas laterales de la ermita.
En la actualidad, como ya he mencionado antes, tiene un tono menos grave y una pérdida de peso de 53 kilos, respecto a antes de su refundición.
El bronce tiene un peso de 1.104 kilos, unidos a los 660 kilos de madera de la trucha y 185 de herrajes tiene una suma de 1949 kilos.
6 ª Campana: "JOSEFA MARIA, JOSE Y SAN ROQUE"
Como no se guardó en ningún documento se desconoce el año de su fundición y colocación, lo que si consta es el año de su ruptura 1901 y a quien estaba dedicada:
"JOSEFA MARIA, JOSE Y SAN ROQUE".
Se refundió ese mismo año 1901 y el cura que lo gestionó fue D. Antonio Calvo Giner de Albaida, corriendo los gastos a cargo del MI Ayuntamiento y poniendo éste la condición de que a partir de ese momento pasaría a ser de su propiedad. Se le conservó la inscripción que tenía y se le añadió la fecha de su refundición. Se comprometieron los fundidores, señores Roses de Adzaneta a refundirla tantas veces como fuera necesario para que la campana diera el tono exacto respecto al acorde musical existente en las campanas de la torre y en concreto debería ser la octava de la mayor "San Roque".
Su peso era de 153 kilos, como se le añadió bronce por las mermas que suelen existir en la fundición, pesó después 165 kilos.
Se organizó una gran fiesta el día de su bendición y colocación, acudiendo incluso para el evento la banda musical de Onil.
Esta campana no ha llegado hasta nuestros días, porque el año 1936 fue derribada del campanario para fundirla en material bélico.
Su peso era de 153 kilos, como se le añadió bronce por las mermas que suelen existir en la fundición, pesó después 165 kilos.
Se organizó una gran fiesta el día de su bendición y colocación, acudiendo incluso para el evento la banda musical de Onil.
Esta campana no ha llegado hasta nuestros días, porque el año 1936 fue derribada del campanario para fundirla en material bélico.
7 ª Campana: "PURÍSIMA CONCEPCIÓN"
Esta campana es la pequeña de las existentes en la actualidad en el campanario, fue fundida por el cura D. Toribio Sellés para sustituir a la anterior, porque se había quedado un vacío en la torre. Su inscripción dice:
"PURÍSIMA CONCEPCIÓN, CASTALLA 1943".
Teniendo un peso en la actualidad 25 kilos menor que la precedente.
Según me contó Octavio el sacristán y ratificó después D. Toribio, nada más colocarla en el campanario se revistieron los dos para la ocasión y a continuación subieron para, no sólo bendecirla, sino bautizarla e incluso ungiendola con los aceites sagrados.
El bronce tiene un peso de 140 kilos más 75 de la madera de la trucha y 30 de herrajes, en total tiene una suma de 245 kilos.
8 ª Campana: "LA ASUNCIÓN"
Esta es la más reciente de las existentes, se fundió en 1989 para sustituir a "la mediana", antes mencionada en el tercer lugar, por encontrarse rajada y en esas fechas sin posibilidad de soldadura ni otra solución. Por este motivo conservó el nombre del anterior, porque se fundió para sustituirla. Su inscripción dice:
"MARIA DE LA ASUNCION ME LLAMO, ME FUNDIERON EL 3 DE MAYO DE 1989 EN SUSTITUCION DE LA ANTERIOR QUE SE FUNDIO EN 1739 Y SE REFUNDIO EN 1830. SIENDO CURA DE LA PARROQUIA DE ESTA CIUDAD DE CASTALLA D. LUIS CERDA. A EXPENSAS DE LA COMUNIDAD ".
Para la fundición de esta campana, intentaremos por todos los medios buscar la mejor solución posible y satisfacer la añoranza existente en el pueblo por la falta de la tonalidad grave que faltaba en el campanario, después de la refundición de la campana "San Roc ". Para ello busqué un grupo de personas que tuvieran ilusión e interés para llevar a buen término esta obra. Más tarde, este grupo de personas presidido por el cura D. Luis Cerdá formaría la comisión de la campana, y fueron las siguientes:
Emilio Bernabeu
Antonio Berbegal
Francisco Antón
Idelfonso Verdú
Rubén Palacios
Francisco José Rico
Juan Carlos Candela
Tras preguntar opiniones a todo el pueblo de la solución que debía darse al arreglo de la campana rota, la inmensa mayoría se inclinó por esta opción de hacer una nueva más grande, buscando como he mencionado ese tono más grave .
El siguiente paso que dimos fue pedir presupuesto a varias fábricas de campanas para ver cuál de ellas nos convencía más. Tras tantear en diversas reuniones nos decidimos en encomendarselo a la empresa de Santander Hnos. Portilla por los siguientes motivos:
Emilio Bernabeu
Antonio Berbegal
Francisco Antón
Idelfonso Verdú
Rubén Palacios
Francisco José Rico
Juan Carlos Candela
Tras preguntar opiniones a todo el pueblo de la solución que debía darse al arreglo de la campana rota, la inmensa mayoría se inclinó por esta opción de hacer una nueva más grande, buscando como he mencionado ese tono más grave .
El siguiente paso que dimos fue pedir presupuesto a varias fábricas de campanas para ver cuál de ellas nos convencía más. Tras tantear en diversas reuniones nos decidimos en encomendarselo a la empresa de Santander Hnos. Portilla por los siguientes motivos:
1 Era una empresa de varias generaciones de campaneros y nos aseguraba que las fundían como desde antiguo se había hecho, de una forma artesanal.
2 Con la mismo aleación, esto es, 80% de cobre y 20% de estaño, que otras empresas ofrecían, el kilo de bronce ya fundido, resultaba más económico y la inscripción era gratuita, lo que en otros no.
Queriéndonos asegurar de la calidad del sonido creímos conveniente durante el mes de julio de 1988, desplazarnos Francisco José Rico "Pallisa", Francisco Berbegal "el campechano" y yo, para hablar personalmente y mostrar un vídeo ilustrativo de nuestras campanas a los fundidores y aprovechar para escuchar algunas de sus campanas. Fue un acierto porque cuando llegamos a Santander tenían tres campanas nuevas acabadas de sacar del molde, las que pudimos escuchar y comprobar que tenían una gran calidad de sonido. Después de volver a Castalla propuse una reunión con la comisión para contarles y mostrarles en vídeo la satisfactoria experiencia tenida con los campaneros Abel y Marcos Portilla.
Después de unos meses de deliberación se firmó el contrato y se mandó por correo, indicándome Abel Portilla, fundidor, telefónicamente que tenía algo de miedo con esta campana porque era de un tamaño más que considerable, para ajustarse con el peso pedido de 1600 kilos por quea un milímetro de grosor en el molde podía suponer muchos kilos de más o de menos, a lo que yo le respondí que no sufriera por ello, que nosotros, como ya le habíamos comentado, lo que buscábamos era una campana grande con un tono grave, por eso era preferible que se excederá que no llegara al peso. Lo que para él supuso un gran alivio.
Junto con la campana se desplazó hasta Castalla el hermano de Abel, o sea Marcos Portilla para ayudarnos en su colocación, bajada de la anterior, y recolocación de "San Roque". Nada más llegar a Castalla la llevamos a la Cooperativa, lugar en que la descargamos con un torito elevador de la industria Ripay y acontinuación procedimos a pesarla. El peso de la campana fue de 1741 kilogramos, siendo éstos los que a él se le abonaron a 1.500 pts por kilo. Tuvo un coste de 2.611.500 pts. paganse íntegramente por donativos populares y mayoritariamente anónimos. La tarea de colocación finalizó el 26 de julio de 1989.
Después de realizarle su primer volteo, que por cierto le hice manualmente, ya que el motor y martillo todavía tardamos unos días más a montarselo, volví a quedar decepcionado porque aunque era un sonido precioso y muy potente no era la nota musical esperada, siendo el tono bastante parecido al de la segunda, a pesar de llevarse 637 kilos de diferencia.
El bronce tiene un peso de 1.741 kilos más 815 kilos de madera de la trucha y 610 de herrajes tiene una suma de
3166 kilos.
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