Parece que sí, de momento el
refrán que encabezaba la entrada anterior (a la tercera va la vencida) sí que
se está cumpliendo, ¡toquemos madera! El pasado lunes comenzaron las obras de
extracción de escombro de las criptas teniendo ya una completamente vacía, llenándose
dos contenedores de escombro, sin
grandes hallazgos apenas unos trozos de tinajas o jarros.
En esta entrada quiero también
hacer mención a la presentación del libro de Juan Antonio Mira sobre las
restauraciones de la parte exterior de la iglesia: ábside, campanario, fachada principal
con la portalada y lateral izquierdo. En mi opinión fue muy ilustrativa e
interesante, principalmente en las explicaciones de Marius Bevia con referencia
a la portalada de la fachada principal.
Y como estamos inmersos en todo
este tema de restauraciones he considerado que sería interesante colocar alguna
fotografía de la restauración de 1986, la cual puede considerarse que fue
completamente integral por efectuarse las siguientes intervenciones: extracción
de la piedra en los sitios donde estaba enyesada o pintada, remodelación de las
basas, columnas y capiteles desintegrados y rehechos con yeso en los años 40,
cancela nueva, rejuntado de todas las
piedras siendo estas limpiadas con cepillado o en algunas zonas abujardado,
reconstrucción de los decorados de piedra de la capilla de la Virgen de la
Soledad, reforma del baptisterio, nueva peana de San Roque, toda la instalación
eléctrica incluido el baldaquín y
adquisición de nuevas lámparas (las tres grandes de fabricación casera), pulido
y acristalado de todo el piso, pintado de sacristía, capilla de Santo Tomás,
capilla de la comunión completa exceptuando los frescos, reparación del tejado
levantando todos los caballones, recolocándolos nuevamente con cemento, adquiriendo
alrededor de 3500 tejas nuevas – pero antiguas-, incluyendo la cúpula de la
capilla.
Tal como afirmó Juan Antonio Mira
en la presentación de su libro, que personalmente creo que tiene toda la razón,
deben quedar todas estas actuaciones bien explicadas y por escrito para que
quede constancia para la posteridad, pues concretamente esta restauración a la
que me refiero de 1986 no hay constancia por escrito de apenas nada, siendo
como he afirmado de una gran envergadura, por ello me gustaría si algún día
dispongo de tiempo, el desglosarla y documentarla por conpleto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario