Como algunos seguidores del blog
han mostrado interés y me han preguntado porque no realizo ninguna entrada para
contar el estado en el que se encuentran las obras del piso de la iglesia, he
pensado hacer un breve resumen en estas fechas porque en las próximas
festividades que se avecinan, lógicamente, todas las entradas serán sobre los
toques de campanas.
El no comentar nada durante tanto
tiempo, está motivado principalmente por ser la evolución muy lenta, a pesar de
que han sido muchos los contenedores de escombros que se han extraído, pero
claro partimos de la base de que este escombro se extrae por los mismos brocales
que se vertió, siendo la mayoría de estos muy estrechos, de unos 60 x 60 cm. aproximadamente.
Prácticamente la totalidad de las
criptas ya se encuentran vacías, pero eso sí solo de escombro, porque al llegar
a los cadáveres se ha tenido que detener esta extracción, ya que el protocolo
arqueológico y sanidad requieren que cada hueso que se extraiga sea analizado y
estudiado, lo que conlleva un gasto extra, imposible de asumir por parte de la
parroquia, ya que son muchos centenares de antepasados nuestros cuyos restos
allí descansan.
En un principio la idea que teníamos
era concentrar todos los esqueletos en dos o tres criptas, y vaciar por
completo aquellas que suponemos puede haber filtraciones de agua, para así
intentar buscar la mejor solución para evitarlas, y aprovechar para hacerlas
visitables (pues en el centro de las bóvedas tienen casi tres metros de altura)
exponiendo en ellas los pequeños
hallazgos realizados entre el escombro, que como he comentado en otra entrada
se va todo al MARQ de Alicante, pero bueno al menos hemos conseguido que las
criptas tengan una buena cámara de aire y que no tengan yeso, pues de todos es
sabido la mala unión que tiene con la humedad.
En estos momentos la extracción
está concentrada en el cuarto de las andas, que como su nombre indica es el
lugar donde se guardaban todas las andas procesionales. Éste se encuentra
situado debajo de la sacristía, hundiéndose tanto el mencionado cuarto como la sacristía
y el archivo parroquial que se encontraba sobre esta en el incendio de 1936, pavimentándose a principios de los años cuarenta el nuevo piso
de la sacristía sobre todo este escombro. En este habitáculo han aparecido
pequeñas piezas como trozos de faroles de andas, de lámparas, algún crucifijo, unos porta paz,
restos de molduras de yeso muy decoradas, (lo que manifiesta que incluso la
antigua sacristía debió de ser preciosa por su gran decoración) restos del antiguo
piso de cerámica policromada y lo que podría ser un gran ventanal o acceso al
exterior tapiado desde fuera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario