4 de septiembre de 2010
Y batallan batallan …………. Sucedió lo que tenía que suceder; se rompió el badajo.
Precisamente este verano estaba comentando la resistencia de estos badajos de la empresa Técnica y Artesanía, sin sufrir ninguna rotura desde que se montaron nuevos en el 2002.
Hay muchas opiniones como debe ser o no ser un badajo para que tenga más resistencia en el golpeteo. Unos opinan que deben ser más gruesos, otros en cambio que más finos para que soporten mejor la vibración del golpe; unos que deben ser de hierro y otros que de madera para no transmitir la vibración, hay para todos los gustos.
Desde mi experiencia personal y con más de 35
años metido en el tema, quiero constatar que son varios tipos los que he
probado, unos de Salvador Manclús, otros de los hermanos Portilla, otros de
Técnica y Artesanía 2001 y algunos de fabricación propia, sin que ninguno de
ellos haya superado los dos o tres años de vida sin roturas exceptuando estos
de Técnica y Artesanía que han llegado a superar los 8 años, siempre
refiriéndome a las campanas grandes, ya que en las pequeñas es otra historia ,
resisten muchísimo más.
En otro apartado, me voy a meter más de lleno e iré narrando los distintos tipos y formatos de badajos por ser una pieza de vital importancia, tanto en la duración de la campana como en su sonoridad.
Como estaba mencionando el día 4 de septiembre, último día de las fiestas Patronales a la Virgen de la Soledad Gloriosa, en el volteo de las 8'30 h. para la recepción de las autoridades e inicio de la procesión, percibí en sonido de la campana mayor "María de la Asunción" que no daba un golpe limpio, sino más bien difuso, lo cual me hizo pensar que algo extraño le sucedía al badajo y me decidí rápidamente a subir para revisarlo.
Nada más llegar me di cuenta de que efectivamente, uno de los cuernos del badajo que sirven para su unión con la campana estaba roto, por lo que este colgaba ladeado y articulaba a lo loco por tener sólo atadura en un lateral
Como era ya la hora de la procesión y no teniendo tiempo para cambiarlo por uno de los antiguos, mientras reparaba este, y tras informar el señor cura D. Salvador Valls, decidimos dejar esta campana parada para evitar daños mayores.
Como esta campana hasta el 2 de noviembre, día de todos los fieles difuntos, no es utilizada con el badajo sino solamente con la electro-maza que tiene lateral, nos tomamos con algo de calma su reparación.
El día 15 de septiembre subimos para quitarlo mi hijo Juan Carlos, mi amigo Fran y yo, y a continuación llevarlo al taller para repararlo soldándolo.
El día 29 del mismo, teniendo un rato libre después de finalizar la jornada laboral, me decidí a efectuarle la reparación, realizándola de la manera siguiente:
1 º Con una radial y disco de corte le saqué punta a los dos extremos de la rotura como si de dos lápices se tratara.
2 º Llené toda la endidura hasta dejarla en su espesor normal.
3 º Con disco de pulir le repasé toda la soldadura para evitar que hubiera asperezas que pudieran cortar la cuerda de amarre.
4 º Darle una nueva capa de pintura oxifer negra para evitar la corrosión del hierro, ofreciéndose voluntario para pintarlo mi compañero Luis.
Y por fin, el día 6 de octubre nos dispusimos a montarlo de nuevo en su lugar, que no es otro que el interior de la campana, sujetándolo con la cuerda de amarre y el cable de acero de seguridad para evitar su caída en caso de rotura o desgaste de dicha cuerda.
Para finalizar este apartado, quiero dar las gracias a la empresa "LEAL", en la que trabajo y a sus propietarios Paco, Manolo, Carlos y Luis en los que siempre he encontrado y encuentro todas las facilidades en lo que pueda necesitar para la realización de estas tareas de reparación y mantenimiento de las campanas, siendo los materiales que utilizo regalados siempre por ellos, así como a mis compañeros los que siempre han tenido una actitud de total disponibilidad y ayuda para la realización de estas y otras tareas.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario